Embarque el domingo por la tarde a partir de las 18.00 horas en el Club Náutico de Ibiza, donde os estará esperando un aperitivo de bienvenida: un momento para conocernos a todos, pero sobre todo para conocer el barco, especialmente para aquellos que nunca han tenido unas vacaciones en un barco. Se puede llegar al puerto deportivo desde el aeropuerto con el autobús nr. 10 con un coste de unos 3,50 euros. Por la noche, después de tomar asiento en su camarote (según lo indicado por el patrón) y conocer a los demás miembros de la tripulación, ¡listo para partir! Velada en las callejuelas del casco antiguo de Ibiza con cena a base de especialidades locales. Los que quieran pueden esperar el desfile de discotecas por la ciudad. Siempre es un espectáculo divertido con música y baile.

Después del desayuno habrá una reunión informativa con el patrón antes de ir, todos juntos, a hacer la cocina semanal (compra de comida y bebida). Alrededor del mediodía estaremos listos para maniobrar para dejar el amarre navegando durante unas 10 millas hacia la reserva natural del Esplamador. A esta isla solo se puede llegar en barco: encontraremos kilómetros de playas de arena blanca totalmente vírgenes, sin ningún tipo de edificación, a excepción de una torre vigía, la Torre de Sa Guardiola; Así que estaremos en un lugar exclusivo y salvaje a la vez. Un chapuzón, un paseo por la preciosa playa blanca y rosa, una visita a las salinas y disfrutaremos del primer aperitivo con una preciosa puesta de sol!

Por la mañana, al despertarnos, desayunaremos juntos en el barco, rodeados de un espectáculo excepcional de la naturaleza. Un agradable baño en las aguas cristalinas y al oeste de Ibiza pasando por Es Vedrà: ¡para aquellos que llegan por primera vez es la isla mágica! Es Vedrà está envuelta en un aura de misterio y en torno a ella giran fascinantes mitos y evocadoras leyendas: algunos afirman que es la Isla de las Sirenas contada en la Odisea de Ulises, otros un vestigio de la civilización perdida de la Atlántida. Continuamos con la Puesta del Sol, un ritual ibicenco que quedará como uno de los recuerdos más imborrables del viaje: la impresionante puesta de sol de Cala Comte, con la isla de Conijera como telón de fondo, en uno de los chiringuitos más bonitos saboreando el mojito sentado en el acantilado.

Cuando nos despertemos en Cala Comte nos daremos nuestro último baño en esta bahía antes de izar las velas hacia Cala Tarida, Cala D'Hort y Cala Llentresca: así sucesivamente hasta Formentera pasando por los acantilados rojos de Porroig. Por la noche dormiremos en Illetes: la famosa franja de arena de Formentera. El nombre significa ''playa de pequeñas islas'' y se llama así porque está protegida por varios islotes. Arena blanca y fina, aguas turquesas, tótems formados por montones de piedras erigidas por los hippies como señal de su paso y como buen augurio... y un mar doble, tranquilo por un lado, un verdadero paraíso en la tierra y agitado por el otro, donde los surfistas siempre están buscando olas para montar. Aperitivo en el barco al atardecer y luego cena todos juntos...

Ya es jueves, pero queremos llevarte aún más al sur... Para mostrarte una de las calas más evocadoras de Formentera, nos acercamos hasta Cala Saona. Aquí también el agua es fantástica, se puede ver en los reflejos en los cascos de los barcos a una milla de distancia. Tranquila y de belleza paradisíaca, la playa de arena blanca y suave ofrece hermosas vistas de Punta Pedrera y Punta Rasa y ofrece la posibilidad de hermosos paseos inmersos en un paisaje verde y silencioso. También hay acantilados escarpados bajo los que bucear, ¡y aquí encontraremos el mejor mojito de las Islas Baleares! La puesta de sol sobre la costa es un espectáculo que no te puedes perder: el contraste entre el color rojo de las rocas y el azul profundo del mar, además de la vista de fondo de la isla de Ibiza, es algo realmente único en el mundo.

El viernes saldremos a navegar alrededor de la isla de Formentera pasando por Escalo', nadando aquí y allá, y luego fondearemos por la noche en Es Pujols para desembarcar y visitar Formentera, para aquellos que lo deseen con buena música en directo en el Teatro Pereyra, ¡el recuerdo para llevarse a casa será aún más bonito! ¡Pero tampoco faltan las discotecas para los que quieren levantarse por la mañana!