Nuestra aventura marítima comienza en la hermosa Procida, una perla del Mediterráneo que encanta con su cultura y vistas marítimas. Después de una sesión informativa detallada sobre el barco y los protocolos de seguridad, nos instalamos en los camarotes y pasamos una agradable velada en Procida.

A la mañana siguiente, después de un abundante desayuno, navegamos por las aguas para llegar a Ventotene, otra postal de belleza con su encantador puerto romano. Las aguas cristalinas y el fondo marino transparente ofrecen la oportunidad de bucear inmediatamente después de echar el ancla frente al pueblo. En Ventotene, además de las maravillas marinas y el pintoresco pueblo, no puede faltar una visita a la cárcel de Santo Stefano, una experiencia única que enriquece nuestro viaje.

A continuación, ponemos la proa hacia Ponza, donde tendrá muchas opciones para elegir con lugares como Chiaia di Luna, Cala dell'Arco, Piscine, Frontone, Lucia Rosa y otros. Cansados de explorar estas cuevas y bahías vírgenes, dirigimos nuestro barco a Palmarola, un verdadero paraíso casi deshabitado, con una villa de diseño y el reconocido restaurante de Cala del French. Palmarola nos recibe con el famoso acantilado llamado la Catedral, parte de una reserva natural desde 1998.

Antes de salir de Palmarola, nos detenemos en Cala Brigantino y admiramos los Farallones de Mezzogiorno. Después, regresamos a Ventotene para darnos un refrescante baño antes de aterrizar en la bahía de Sant'Angelo para pasar la noche.

Al día siguiente, nos dirigimos hacia una de las bahías más bellas y famosas de Procida, La Chiaiolella, conocida por ser el lugar de algunas escenas de la película "Il Postino". Por la tarde, regresamos a Marina di Procida, donde pasamos la noche en uno de los restaurantes locales. El sábado siguiente, desembarcamos a las 09:00, cerrando así nuestra inolvidable semana de exploración marítima.